¿Cuál es la diferencia entre CFD y Futuros? Esta es una pregunta que se plantean muy a menudo los inversores que prefieren especular a corto plazo. ¿Por qué? Porque tanto los CFDs como los futuros son dos productos financieros que esencialmente tienen las mismas características.
Sin embargo, operar con CFD y operar en el mercado de futuros tiene diferencias sustanciales que no todos los inversores conocen, a pesar de ser instrumentos cada vez más “comunes”.
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Por lo tanto, esta guía va a responder a todas las preguntas relacionadas con las diferencias entre CFD y futuros. Veamos.
¿Qué son los futuros?
Los futuros son instrumentos financieros derivados en forma de contratos que se negocian en mercados tradicionales. Por lo tanto, están sujetos a una mayor estandarización y control. A través de estos contratos, ambas partes, tanto el contratista como el suscriptor, se comprometen a vender o comprar una cierta cantidad de activos (financieros) en una fecha.
Expliquemos mejor estas dos características de los futuros:
- Se pueden negociar en mercados regulados. A través de las llamadas cámaras de compensación, que actúan como contrapartes compensadoras del contrato de los futuros. La cámara de compensación, por lo general es una agencia o entidad independiente que supervisa y regula el funcionamiento adecuado de una bolsa de futuros.
- Son contratos altamente estandarizados. Sus características están predefinidas y no se pueden modificar por las contrapartes, haciéndolos intercambiables. La estandarización implica definir varios parámetros, incluido el tamaño del contrato, la fecha de vencimiento y el método de negociación.
Aquí encontramos la primera diferencia entre CFD y futuros: tienen un spread promedio más bajo que el de los CFDs porque el precio de futuros es el “oficial” del mercado.
¿Qué es el mercado de futuros?
El mercado de futuros tuvo su origen en la industria de las materias primas debido a que los agricultores, los mineros y los productores de petróleo querían gestionar el riesgo de no saber qué precio obtendrían por su producto en el futuro. Así fue que nació el contrato a plazo.
El primer contrato a plazo o de futuros se celebró en 1851. El activo era maíz y se firmó con el Chicago Board of Trade (CBOT). En el contrato se comprometían tanto el vendedor (un agricultor), así como el comprador (una empresa industrial) a participar en un futuro intercambio de productos a cambio de dinero a un precio fijo.
Desde entonces, el comercio de futuros ha atraído a más mercados, compradores y vendedores.
Sin embargo, con el desarrollo de nuevas tecnologías y ordenadores, muchos operadores prefieren operar con CFD en el mercado de futuros, sobre todo al conocer la diferencia entre CFD y futuros.
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Cómo funcionan los futuros
A diferencia de las acciones, los contratos a plazo o futuros tienen una fecha de vencimiento. Cuando se acerca la fecha, aparece lo que se conoce como un “rollover”, es decir, la rotación del contrato que se cumple al siguiente contrato, que tiene una duración mayor.
Pero, ¿qué sucede si no se renueva el contrato? En ese caso, se eliminará automáticamente, debido a la conocida regulación “física” del contrato.
También se dice que el futuro es un contrato simétrico, en el sentido de que ambas partes (comprador y vendedor) están obligadas a hacer una ejecución al vencimiento.
Sin embargo, debemos tener en cuenta que en la mayoría de los casos operar en el mercado de futuros no resulta en la entrega física del activo subyacente. En esto no hay diferencia entre CFD y futuros.
¿Qué es CFD?
Los CFD o “Contratos por Diferencias” (Contracts for Difference en inglés) son instrumentos financieros derivados que se negocian en mercados fuera de las Bolsas. Por lo tanto, los CFD suelen adaptarse fácilmente al trading online. Esta es otra diferencia entre CFD y futuros. Por lo tanto, operar con CFD significa negociar con sencillez y rapidez sin tanta burocracia.
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En efecto, operar con CFD tiene sus ventajas. Solo pensemos en la cantidad menor de capital necesaria para operar. Así que los CFDs son una herramienta especulativa al alcance de pequeños inversores. También se puede operar con CFD las 24 horas del día o en horarios más largos a diferencia del mercado de futuros.
Otra diferencia entre CFD y futuros es que son más adecuados para inversiones a corto plazo. Por lo tanto, evitan los costos de financiación durante la noche (overnight) que debe pagarse al broker para mantener una posición abierta hasta el otro día. Si se suma este pequeño porcentaje, puede resultar una carga. En efecto, operar con CFD se presta para trading intradía o scalping, o para posiciones de varios días, pero no demasiado.
Diferencia entre CFD y Futuros
Existe más de una diferencia entre CFD y futuros. Por ejemplo, los CFD se negocian fuera de la Bolsa, pero los futuros no. Esto convierte al CFD menos estandarizado y más sencillo para negociar online.
Otra diferencia entre CFD y futuros es que el precio de los CFDs puede variar libremente según el broker online, como es el caso de los Market Maker.
Además, también los CFDs no suelen tener vencimiento, mientras los futuros sí.
Hagamos un resumen de las principales diferencias:
- Fecha de vencimiento: los futuros tienen mensual o trimestral y el CFD por lo general no tiene fecha de vencimiento.
- Intermediario: los futuros se operan a través de un intercambio (CBOT, CME, NYMEX), el CFD con una contraparte (el broker).
- Tamaño del contrato: los futuros se caracterizan por ser contratos de gran tamaño, y los CFDs muchas veces por un capital reducido.
- Mercado donde se opera: se opera CFD en más de 3000 mercados, mientras que los futuros tienen menos mercados disponibles.
Ventajas
Precios en total transparencia. Los futuros se operan abiertamente en bolsas públicas como la Bolsa Mercantil de Chicago. Los precios reflejan claramente el mercado subyacente debido a que se compra y vende con frecuencia.
Aquí hay una diferencia entre CFD y futuros, ya que el precio de los CFDs se calcula a partir del mercado de futuros subyacente. Pero los brokers suelen adaptar las tarifas.
Conveniencia para los inversores de alto nivel. Las tarifas del mercado de futuros tienden a ser reducidas en mercados grandes. Esta es una buena oportunidad para aquellos que negocian grandes volúmenes.
Sin embargo, esta diferencia entre CFD y futuros no facilita a los traders con un capital menor. Por lo tanto, operar con CFD es más ventajoso aún que negociar en el mercado de futuros en este sentido.
Desventajas
Contratos muy grandes. Negociar en el mercado de futuros significa comprar contratos con una cantidad estandarizada de un producto o materia prima. Por lo tanto, no hay forma de reducir estas cantidades ni dividirlas por cada tipo de producto.
Sin embargo, la diferencia entre CFD y futuros es que, con los CFDs puede ajustar el tamaño del contrato de acuerdo con su gestión de riesgos e invertir con lotes y micro lotes (0.01) en casi cualquier instrumento.
Fechas de vencimiento. Los futuros tiene una fecha de vencimiento, y al acercarse la fecha es probable que no pueda mantener abierta la posición.
Aquí tenemos una diferencia entre CFD y futuros: los CFDs no tienen fecha de vencimiento, por eso son más flexibles y dan al operador la posibilidad de abandonar su posición en cualquier momento.
Menos mercados disponibles. Si bien hay numerosos mercados de futuros, no son nada comparado con el volumen de mercados de CFD.
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Cómo invertir
No hay mucha diferencia entre CFD y futuros para operar. De todas formas, es importante conocer las fechas de vencimiento de los mercados de futuros, así como la gestión de riesgos y el tamaño del contrato.
Los siguientes factores nos ayudarán a considerar cuál podría ser la mejor estrategia:
- ¿Qué estilo de negociación es mejor adoptar? Hay una amplia variedad de estilos que podemos elegir.
- ¿Es mejor ser un trader intradía o mejor operar con diferenciales? Definir un plan es esencial para construir una base sólida desde la cual negociar.
- ¿Qué mercados son los mejores para comerciar? ¿Petróleo, materias primas? Recordemos que cada contrato a plazo tiene distintos tamaños y cantidades mínimas con las que se puede negociar. Por lo tanto, los inversores con capital reducido tienen más ventajas al operar con CFD.
- ¿Qué estrategia debo usar? Definir su estrategia de trading lo ayudará. Por lo tanto, establezca los parámetros como las entradas y salidas. Use indicadores técnicos junto al estudio de los gráficos de precio para ayudarlo antes de tomar decisiones. Trate de mantenerse coherente con sus decisiones.
Lea nuestra guía sobre cómo invertir en la bolsa
Cómo invertir en CFDs
Hagamos un ejemplo. Si desea abrir una posición alcista sobre el oro, entonces hay que elegir entre estas 2 opciones:
- Comprar un CFD a un cierto precio. A la conclusión del contrato, si el precio es superior, se liquidará la ganancia. En caso contrario, sufrirá una pérdida.
- Abrir una posición bajista. Para esto, hay que elegir la opción de vender a un cierto precio. A la conclusión del contrato, si el precio es menor, liquidará la ganancia. De lo contrario, sufrirá una pérdida.
Al operar con CFD tiene que haber una contraparte autorizada y regulada para ofrecer sus servicios, conocido como broker online.
Además, como hemos mencionado antes, la diferencia entre CFD y futuros es que es un contrato no estandarizado. Por lo tanto, el broker tiene derecho a ofrecer distintos tamaños de contrato, precios competitivos, así como renovación automática al vencimiento del subyacente.
Cómo invertir en futuros
En España, el mercado de futuros es accesible a través de una cuenta específica que hay que abrir en un banco o una empresa de bolsa (SIM) o intermediarios especializados. El cliente debe depositar una cantidad de dinero suficiente que garantice los márgenes o un porcentaje del tamaño del contrato definido por la cámara de compensación. Además, debe contar con un margen de variación que representa la liquidación diaria de utilidades y la solicitud de fondos adicionales para cubrir pérdidas.
¿Le parece un poco complicado? En ese caso, es posible probar las siguientes alternativas especulando sobre el precio de los distintos futuros a través de CFD.
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Preguntas Frecuentes
Los futuros son contratos financieros en los que las contrapartes, comprador y vendedor, celebran un acuerdo para el intercambio de una determinada cantidad de activos al vencimiento del contrato, ya sean reales o financieros, a un precio fijo.
La diferencia entre CFD y futuros radica en que, con los CFD, el vendedor suele ser el broker, pero con los futuros, usted opera directamente con un comprador o vendedor real del producto que está negociando. Con un CFD, el operador tiene que tomar en cuenta la diferencia entre el precio de apertura y cierre del mercado subyacente.